BEMER: Terapia Físico Vascular
Terapia no invasiva, indolora y relajante. Es un tratamiento sistémico, actúa sobre todo el cuerpo, pudiendo reforzar los efectos sobre una zona concreta si así lo deseamos. Es el mejor método para mejorar la microcirculación limitada, es decir, la circulación sanguínea en los vasos de pequeño calibre. Normaliza el pulso de la vasomoción (3-5 veces por minuto) que suele estar limitada por el propio proceso de envejecimiento, por factores ambientales, por malos hábitos alimenticios, ingesta de fármacos, enfermedades crónicas, inflamación de bajo grado... reduciéndose este pulso a 1 o 2 veces cada 10 minutos.
Emplea pulsos electromagnéticos de baja intensidad y frecuencia para transmitir la señal que normaliza el flujo microcirculatorio. Esto hace que la oxigenación, los nutrientes e incluso los fármacos tarden menos tiempo en llegar a todas las células, de ahí su importancia como tratamiento coadyuvante.
Efectos
- Mejora el riego sanguíneo en órganos y tejidos de todo el cuerpo.
- Mejora la regeneración porque mejora la llegada de oxígeno y nutrientes a las células, y mejora la recogida de las sustancias de desecho, toxinas, sustancias inflamatorias...
- Ayuda a la disminución del dolor.
- Favorece la acción del sistema inmunitario, las células defensivas llegan más rápido a su destino y en mayor número.
- Combinado con otros tratamientos ayuda a acelerar el proceso curativo disminuyendo los tiempos de recuperación.